En primer lugar, no dejéis a nadie que gobierne vuestra
mente ni vuestro cuerpo y emplead especial atención para no poner límites a
vuestras ideas porque se puede ser un hombre libre a pesar de sufrir ataduras
más fuertes que las de un esclavo. Escuchad a los hombres, pero no os
entreguéis a ellos en cuerpo y alma. Sed respetuosos con el poder, pero no los
sigáis ciegamente. Juzgad con lógica y con razón, pero no hagáis comentarios.
No consideréis a nadie superior a vosotros, ni os
consideréis superior a nadie, al margen del rango a de la posición que ocupen
en la vida. Tratad a todos con justicia, porque si no intentarán vengarse de
vosotros. Aferraos con fuerza a vuestras creencias, y los demás os
escucharán... en cuanto a las cuestiones de amor.. mi único consejo es que
seáis sinceros, pues es el arma mas poderosa para abrir el corazón o ganar el
PERDÓN.
Eragon, Christopher Paolini